La zona espeleológica de la Cueva de Udías III.
LA HIDROLOGÍA DEL ALFOZ DE LLOREDO.
Marius van Heiningen
LA HIDROLOGÍA DEL ALFOZ DE LLOREDO.
Marius van Heiningen
INTRODUCCIÓN.
En las dos partes anteriores se han tratado la depresión de Udias y la paleotopografía de la zona. En este artículo se trata la posible hidrogeología del Alfoz de Lloredo, basándose únicamente en los mapas y algo de información adicional disponible en internet.
El macizo del Alfoz de Lloredo está compuesto principalmente de calizas y dolomías, parcialmente tapado por una formación impermeable que está presente en las altas cumbres y en el norte del macizo. En el sur afloran unas formaciones de relativamente poco espesor, sin embargo, la caliza C152-1 alberga una cueva extensa (Torca Urbió).
Se ha intentado indicar los posibles acuíferos de las calizas y dolomías del Alfoz.
El artículo termina con el problema de si es posible una conexión de la Torca Urbió con las calizas y dolomías donde se encuentra la Cueva de Udías.
MAPA GEOLÓGICO DEL MACIZO DEL ALFOZ DE LLOREDO.
El mapa geológico está compuesto de partes de los mapas geológicos de Comillas (033) y Torrelavega (034). Se ha usado la topografía, arroyos y cotas bajas, para realizar una delimitación aproximada del macizo del Alfoz de Lloredo, que está indicada en naranja (figura 1). También se ha indicado en rojo el sumidero de la Cueva de Udías (C1), su trayecto subterráneo en línea recta y dos manantiales importantes (M1 y M2).
La masa rocosa más importante del Alfoz son las calizas y dolomías indicadas como C15-23 (en amarillo, ver leyenda en figura 2). Es en estas rocas donde se encuentran la Cueva de Udías e innumerables pozos verticales. Estratigráficamente por encima de estas calizas y dolomías se encuentra una formación impermeable (C16-1, verde muy claro) que aflora en algunas cumbres y al norte de la zona. De las tres formaciones que se encuentran estratigráficamente por debajo de la C15-23, solo la formación del medio C152-1 (calizas con Miliolidos y Toucasia) es favorable para la formación de cuevas.
LA FORMACIÓN IMPERMEABLE SUPERIOR.
La precipitación que cae sobre la formación impermeable C16-1, la que se encuentra por encima de la C15-23, escurre por la superficie hacia abajo. Por tanto, la precipitación que cae sobre las cumbres altas que se encuentran en medio del macizo, escurre hasta llegar hasta las calizas y dolomías del Alfoz donde es absorbido. Estas cumbres no restan aguas del acuífero del Alfoz, al contrario, las aporta en forma concentrada que favorece la génesis de pozos.
La precipitación que cae sobre la parte de esta formación que aflora en el norte de la zona escurre principalmente hacia el norte y por tanto no contribuyen al acuífero de las calizas y dolomías del Alfoz.
LAS FORMACIONES INFERIORES.
De las tres formaciones inferiores, situadas por debajo de las calizas y dolomías del Alfoz (C15-23), solo la del medio (C152-1) está compuesta de roca fácilmente karstificable (calizas). En este caso la gran pregunta es si la formación C153-1 es lo suficientemente soluble para permitir conexiones hidrológicas entre las calizas C152-1 y las calizas y dolomias del Alfoz o si existen contactos directos entre ambos formaciones (por ejemplo por debajo del macizo donde el afloramiento de este contacto estaría tapado por las calizas del Alfoz). Es un asunto especialmente importante porque recientemente se ha descubierto una sima-cueva bastante extensa en la formación C152-1 (la Torca Urbió).
La figura 1 muestra la situación geológica de la zona y la delimitación del Alfoz de Lloredo (en naranja).
La figura 2 muestra la leyenda de la figura 1.
LOS ACUÍFEROS DE LAS CALIZAS Y DOLOMÍAS DEL ALFOZ (C15-23).
En la figura 3 se ha indicado en rojo una aproximación de la superficie cuyas aguas de precipitación acaban en las calizas y dolomías del Alfoz, sea por precipitación directa o por escorrentía de superficies impermeables. Solo está excluida la depresión de Udías, porque ya está tratado en el primer artículo. Se han indicado unos elementos hidrológicos importantes, por un lado el trayecto subterráneo en línea recta de la Cueva de Udías, y por otro lado los dos manantiales M1 y M2.
La Cueva de Udías funciona como un nivel de base interno y atrae todos los desagües cercanos, y por tanto su trayecto es como el eje de un acuífero. Sus aguas salen de la Cueva de la Presa (o Cueva la Verde) en M1, donde parte es captada para un posterior tratamiento como agua potable.
El M2 es el manantial del Arroyo de San Miguel y también parte de esta agua es captada para el mismo uso. Examinando el mapa, parece ser que la procedencia más probable de las aguas es la zona de hoyos situados directamente al sur, en dirección de La Busta. Una conversación con el capataz de la depuradora del agua (tengo que confesar que este dato no viene de internet, pero de una fugaz visita debido a mi creciente interés por la zona) ha aportado dos datos importantes: de ambos manantiales se recogen una cantidad parecida de agua (unos 22 litros por segundo por manantial) y que el agua proveniente de M2 a veces muestra contaminación con amoníaco.
El primer dato indica que el acuífero que alimenta M2 no puede ser muy pequeño y el segundo dato indica la presencia de granjas de ganado (llamadas vaquerías, según el capataz) y las únicas ganaderías del Alfoz están situadas justo en los hoyos antes mencionados.
Los acuíferos que alimentan M1 y M2 están indicados como acuífero C y D respectivamente. La separación entre ambos es una línea arbitraria situada entre los hoyos del acuífero D y el trayecto de la Cueva de Udías (eje de acuífero C). Es posible que la parte del sureste desagua hacia el río Saja y forma su propio acuífero E.
El arroyo de San Miguel funciona como nivel de base local y por tanto separa los acuíferos C y D del acuífero F, situado al este del arroyo.
El acuífero A está situado al este del sinclinal de Cóbreces y probablemente tiene su propio desagua hacia el mar en el norte.
Es muy probable que la zona B no sea un acuífero independiente, y que una parte de sus aguas alimenten el acuífero A y otra parte el acuífero C.
La figura 3 muestra una posible distribución de los diferentes acuíferos de las calizas y dolomías del Alfoz.
LA TORCA URBIÓ.
INTRODUCCIÓN.Desde finales de junio 2010 el Speleo Club Cántabro está explorando la Torca de Urbió, donde ya han topografiado varios kilómetros (ver blog: http://sccespeleo.blogspot.com).
La torca está situada justo al lado y por debajo de una pista que conecta Duña con Bustablado por el monte, y una posible razón de que no haya sido explorada previamente, puede ser un coche viejo que se encuentra colgado (no digo empotrado porque no parece estar muy estable) en su parte alta.
La figura 4 muestra la topografía dibujada sobre una ortofoto de la zona. Una animación de la cueva en tres dimensiones se puede encontrar en el blog del SCC.
SB1 y SB2 son los sumideros de 2 arroyos de corto recorrido y de los cuales el arroyo que desaparece en el SB2 es el más caudaloso. El agua de este último arroyo recorre la galería más oriental de la torca en dirección norte.
La figura 4 muestra la topografía de la Torca Urbió sobre una ortofoto de la zona.
LAS FORMACIONES SOBRE UNA ORTOFOTO.Las diferentes formaciones de roca carbonatada, la caliza 152-1 y las calizas y dolomías del Alfoz (C15-23), son fácilmente reconocibles en una ortofoto de la zona. En la figura 5 se ha indicado la base y el techo de la caliza 152-1 (en naranja) y la base de las calizas y dolomías del Alfoz (en rojo). La entrada de la torca está indicado con TU y resulta que se encuentra justo en el techo de la formación 152-1.
Esta situación es bastante indeseable si se parte de la voluntad de querer conectar la Torca de Urbió con la otra gran cueva del macizo, la Cueva de Udías. Las cuevas se han desarrollado en calizas diferentes y por tanto, a primera vista, no parece probable una conexión entre ambos.
La figura 5 muestra la base y techo de la caliza C152-1 y la base de las calizas y dolomías del Alfoz (C15-23). TU indica la entrada de la Torca Urbió, situada en el techo de C152-1. La línea negra indica la situación aproximada de una falla importante que desplaza las formaciones.
UN PROBLEMA.Los estratos se inclinan unos 20 grados hacia el norte (ambos datos aproximados) y por tanto gran parte de la formación C152-1 se encuentra por debajo de los afloramientos de las calizas y dolomías del Alfoz. Es decir, aunque en la ortofoto de la figura 4 parece que las galerías están situadas en las calizas y dolomías, en realidad se encuentran en la caliza 152-1 que está por debajo. La entrada de la cueva es una gran rampa en dirección norte con un buzamiento parecido a algo mayor al buzamiento de los estratos, lo que hace que las galerías permanecen dentro de la misma formación. Esto está especialmente claro por la parte de la topografía indicado con A (ver figura 4). Sin embargo, la parte de la topografía indicado con C se encuentra a una distancia en línea recta de unos 500 metros del pozo de la entrada (techo de la formación), medido en la dirección del buzamiento. Esto significa que, asumiendo una inclinación de 20 grados, el techo de la formación debe de haber bajado unos 180 metros (se calcula con la tangente). En la animación del blog del SCC se puede ver que las galerías principales, aparte de la rampa de entrada, son prácticamente horizontales y que no llegan ni de lejos a una profundidad de 180 metros mínimo.
Por tanto algo extraño ha pasado.
POSIBLES SOLUCIONES.A primera vista hay tres soluciones:
En primer lugar es posible que el buzamiento de los estratos no es constante y se ha disminuido, y/o que la formación se ha levantado por unas fallas. En este caso el techo de la formación no se encuentra tan bajo y sería posible que todo el desarrollo de la cueva se encuentra en la misma caliza.
En segundo lugar es posible que la caliza C152-1 y las calizas y dolomías del Alfoz se han puesto en contacto directo por una falla. Mirando la ortofoto se puede ver que entre las zonas A y C hay una zona de roca marrón, que a menudo indica la presencia de dolomías. Es frecuente que alrededor de las grandes fallas la roca se ha dolomitizado (la caliza se ha transformado en dolomita).
En tercer lugar es posible que la cueva ha intersectado la formación intermedia (C153-1, ver figuras 2 y 5) en una parte que está compuesta por caliza en lugar de areniscas y limos, y de este modo ha podido haber conectado con las calizas del Alfoz.
Desde luego que cualquier otra combinación también es posible. Solo una investigación in situ podría dar una respuesta fundada.
ORIGEN DE LA TORCA URBIÓ.
Cuando se ve la topo y las animaciones y se lee las descripciones de la cueva, lo que salta a la vista es que es muy improbable que estas amplias galerías se han formado por el pequeño arroyo, apenas medio kilómetro de longitud, que se sumerge en el sumidero SB1. En las descripciones se trata de amplias galerías freáticas con derrumbes de un techo que ha buscado su equilibrio, es decir se trata de un caudal muy considerable.
La figura 6 muestra la separación de los dos arroyuelos de Bustablado (A1 y A2) del río Saja, situado al sur. Entre A y B hay un tramo de separación con altitudes menores de 250 metros.
Puede ser que la Torca Urbió se ha formado por filtraciones y pérdidas del paleo Río Saja, ya hace unos 3 millones de años (ver segundo artículo de esta serie). La actual separación de los dos valles ciegos de Bustablado (los dos pequeños arroyos) con el valle del Saja está situada entre los 290 y los 234 metros de altitud. Además, existe un marcado tramo de unos 800 metros de longitud cuyo recorrido está por debajo de los 250 metros (figura 6). Es posible que la actual depresión de Bustablado, ocupado por los dos arroyuelos, formaba parte de la llanura aluvial del paleo Río Saja, situada a una altura de algo más de 250 metros, coincidiendo con la posición de la Torca Urbió a unos 240 metros, cuyos metros superiores sin duda se han erosionados.. Según el blog
CONCLUSIONES.
Es posible que el Alfoz de Lloredo esté compuesto de 3 acuíferos mayores:
Un acuífero occidental compuesto por parte de la zona A y parte de la zona B.
Un acuífero central compuesto por la zona C y parte de la zona B.
Un acuífero oriental compuesto por la zona D y quizá parte de la zona E.
El desagüe del acuífero central ocurre hacia el manantial M1 y el desagüe del acuífero oriental hacia M2.
El acuífero central es atravesado desde el suroeste hacia el noreste por la Cueva de Udías, que funciona como nivel de base y atrae (pequeños) desagües laterales.
La parte sur de la Torca Urbió está situada claramente en la caliza C152-1. Sin embargo, la parte situada en el noroeste parece problemática, por estar aparentemente fuera de la misma caliza.
Una posible espeleogénesis de la Torca Urbió puede ser que funcionaba como sumidero (de parte) del paleo Río Saja, con la formación C152-1 aflorando en el borde de la antigua llanura aluvial (ver segundo artículo de la serie). Después del levantamiento del final del Plioceno, el Saja se encajó en un nuevo valle más estrecho y algo más hacia el sur, abandonando el sumidero.
Sería interesante realizar una coloración del agua en el sumidero SB2, afirmando o negando una relación con los manantiales M1 y M2 (aparte de confirmar una conexión casi segura con la Torca de Urbió).
Tengo que recordar con énfasis que los tres artículos de la zona espeleológica de la Cueva de Udías se han escrito como ejemplo de cómo sacar información de unos “simples” mapas. Sin embargo, siguen siendo indicaciones y suposiciones que hay que confirmar en el campo. A estos artículos no se puede considerar como la presentación final de unos estudios exhaustivos, solo son unos trabajos preliminares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario